El Ayuntamiento de Lierganes ha finalizado do el asfaltado del barrio de La Rañada, incluido dentro de la delimitación de conjunto histórico, que ha supuesto una inversión de 27.000 euros con cargo al superávit de 2017, que se elevó a casi medio millón de euros. Las obras comenzaron tras las fiestas de Navidad, pero la mala climatología ha retrasado el final de la obra, que ha realizado la empresa Solpavifer.
El objeto principal de la intervención ha sido mejorar el estado de los viales del barrio con una pavimentación en todas sus calles. Los viales con pavimento deteriorado han sumado 2.644 metros cuadrados. Se ha mejorado la rodadura mediante la extensión de una capa formada por mezcla bituminosa de 5 centímetros de espesor, así como un riego de adherencia. Previamente, se han fresado los entronques con cruces e intersecciones, evitando así discontinuidades en el pavimento.
Asimismo, se han regularizado las cotas de los registros según la rasante definitiva. La realización de la obra ha puesto al descubierto una cuneta de hormigón, de hace más de 35 años, que fue tapada en su día por el asfalto. También se han hallado varias tapas de registros de saneamiento, agua y alumbrado, enterradas en su día al asfaltarse el barrio. Todas estas incidencia que no figuraban en el proyecto se han corregido de inmediato.
Se ha repuesto, también, la señalización horizontal en el entronque del vial principal con otros adyacentes. La mayor parte de los viales presentaba un importante deterioro superficial agravado por la presencia de numerosas zanjas, ejecutadas con posterioridad a ser asfaltadas hace más de treinta años.
Ello ha motivado discontinuidades importantes en el pavimentos y puntos de penetración de escorrentía, lo que facilitaba en un deterioro continuo del firme, con importantes zonas con grietas, blandones, y desconchamientos por el envejecimiento de los materiales bituminosos. Esta actuación ha sido posible gracias al acuerdo de los tres grupos políticos que conforman la Corporación: ULP, PP y PRC.
En este barrio destaca la casa de Juan de la Cuesta Mercadillo, conocida como ‘palacio de La Rañada’, uno de los conjuntos arquitectónicos más populares del municipio, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de monumento en 1994. La capilla de este palacio cuenta con la advocación de la Virgen de Guadalupe. Fue mandada construir a comienzos del siglo XVIII por una familia instalada en la zona en el XVI, sobre los restos de una construcción anterior.
También en este barrio se encuentra la casa de José Domingo de la Cárcoba Rubalcaba, edificada a mediados del siglo XVIII, y la ermita del Santo Cristo del Humilladero, del siglo XVI. Buena parte de los empleados de la antigua fábrica de Cañones de Liérganes –siglos XVII-XIX- residían en este viejo barrio del pueblo.