Liérganes ya tiene via libre para rescatar el Servicio de Aguas y Alcantarillado. Un proceso que iniciará de inmediato el Ayuntamiento –seguramente de cara a febrero– para cerrar así uno de los capítulos judiciales que más han preocupado al Consistorio los últimos años. En este caso, la victoria ha sido para el municipio, ya que tanto las últimas sentencias como el propio Consejo de Estado, dan la razón al administrador público, frente a la pretensión de distintas operadoras vinculadas entre sí de mantener la concesión por 25 años otorgada inicialmente a Emilio Bolado, a pesar de no cumplir con el servicio por causas de insolvencia.
El Tribunal de lo Contencioso Administrativo número uno de Santander ha vuelto a dar la razón, en una sentencia de 11 folios de extensión, al Ayuntamiento de Liérganes en su batalla jurídica para rescatar el servicio del agua en manos de una filial de la empresa Emilio Bolado (Servibol). Entre ambas llevaron el servicio desde 2007 al verano de 2013, cuando se produjo la quiebra concursal. El actual equipo de Gobierno defiende que el agua sea un servicio público.
La nueva sentencia desestima íntegramente todos y cada uno de los argumentos de Servibol, pero también de Oxital, la tercera empresa que quiso hacerse con la concesión del servicio tras la quiebra de las anteriores. En mayo de 2015, en vísperas de las elecciones municipales, Servibol le entregó el servicio a Oxital en una escritura ante notario que no tenía validez alguna si no contaba con el visto bueno del pleno municipal.
Desde 2013, el Ayuntamiento viene batallando por resolver el contrato de gestión del agua, ante la pretensión de las sucesivas empresas de hacerse con la concesión esgrimiendo los derechos pactados con la primera. El problema fue que, tras reconocerse este derecho inicial a Servibol -en un Juzgado-, esta empresa entró en concurso de acreedores y ni siquiera llegó a prestar el servicio por una causa de insolvencia.
Sin embargo, quiso hacer la misma operación de traspaso con una tercera empresa (Oxital), a lo que el Ayuntamiento se negó en redondo en una sesión extraordinaria, convocada, el 29 de julio de 2015, por el nuevo equipo de gobierno de la Unión por Liérganes y Pámanes (ULP). El 19 de noviembre de ese mismo año, y en cumplimiento de una sentencia judicial de 2014, el Ayuntamiento entregó a Servibol el Servicio de Aguas.
Pero la filial de Emilio Bolado no pudo presentarse a llevar del servicio, dado que, al estar en quiebra concursal, ni puede contratar trabajadores ni tampoco trabajar para ninguna Administración pública. Un mes después, el 19 de diciembre de 2015, el alcalde convocó un pleno extraordinario y el Ayuntamiento recuperó de nuevo el servicio por segunda vez en apenas dos años y medio.
En la actualidad, varias sentencias y un dictamen del propio Consejo de Estado, e l pasado mes de octubre, han dado la razón al Consistorio y a las demandas planteadas desde 2013 por sendos equipos de Gobierno de PSOE-PRC, y con posterioridad la ULP. El máximo órgano consultivo del Esado dio validez a la decisión del rescate del servicio por la «reiterada insolvencia» de Servibol y por la reiterada negativa del Ayuntamiento a que esta última le pasara los derechos a Oxigtal.
En esta última sentencia el magistrado vuelve a ratificar este extremo de forma tajante y condena a las empresas recurrentes a pagar las costas judiciales, además de abrir la posibilidad de indemnización al Ayuntamiento por el servicio no prestado y las facturas pendientes de Servibol que, según el regidor, Santiago Rego, «son numerosas» y van mucho más allá del depósito aportado por la empresa inicial para hacerse con el contrato.
«Es evidente que la fianza de 45.000 euros depositada por la empresa en 2007, cuando se hizo cargo del servicio, no será suficiente», aseguró el regidor, quien manifestó estar «muy satisfecho» con la resolución judicial, al entender que la sala da un «importante varapalo» a las empresas en litigio. Además, Rego también llama la atención sobre esta victoria judicial con el agua, ya que en litigios de este tipo es complicado para los Ayuntamientos obtener los rescates.
Aunque las empresas también han recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria el fallo judicial, el Ayuntamiento cuenta ya con argumentos de peso para iniciar el proceso de liquidación del contrato y proceder al rescate del servicio de inmediato. De hecho, el Ayuntamiento lleva ya mucho tiempo haciéndose cargo del agua, por la causa de insolvencia de las distintas operadoras de prestar el servicio.