La puesta en marcha de tres proyectos de eficiencia energética – cofinanciados por el Gobierno Regional – permitirá al Ayuntamiento de Liérganes un ahorro de casi el 50 por ciento en la factura del consumo energético de tres edificios públicos y contribuir, además, a reducir la llamada huella de carbono. La inversión se aproxima a los 62.500 euros, y en los tres casos se elimina el gasóleo de calefacción, y se consigue el objetivo de cero emisiones a la atmósfera.
En este sentido, el alcalde de Liérganes, Santiago Rego, ha valorado muy positivamente las tres iniciativas, que afectan al propio edificio Consistorial, la Oficina de Turismo Municipal, junto al Puente Mayor, y el Centro Cívico ubicado en la Plaza de los Cañones. “Es una inversión muy necesaria, dada la realidad con la que nos enfrentamos los Ayuntamientos, con costes cada vez más altos en las facturas energéticas en los edificios y centros públicos, principalmente desde que comenzó el conflicto bélico en Europa”.
Ahora, en el caso de la oficina de turismo, el proyecto ha consistido en la instalación de una placa fotovoltaica de autoconsumo de 4,55 kWp, por lo que se pasa así a utilizar una fuente de energía renovable, la solar, para generar una energía eléctrica propia, limpia y sostenible. La subvención recibida desde la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, ha ascendido a casi 12.000 euros, de los que casi 2.000 euros corresponden al ente municipal
En cuanto a los proyectos de eficiencia de los que se han beneficiado la Casa Consistorial y el Centro Cívico y Social, han consistido en la instalación de una caldera de biomasa (pellets) en ambos edificios, sustituyendo así a la convencional para el suministro de agua caliente sanitaria y calefacción en las dependencias de los citados inmuebles.
En el edificio del Ayuntamiento el proyecto ha ascendido a 24.132 euros, de los que el Consistorio ha aportado 16.790 euros, y el resto la comunidad autónoma. En el caso del Centro Cívico la inversión total de la intervención ha sido de 26.134 euros, de los cuales el Ayuntamiento ha puesto 18.793 euros, y la cantidad restante -7.341 euros- ha sido de una subvención de la Consejería de Empleo y Políticas Sociales.
El alcalde ha explicado que este tipo de calderas utiliza un combustible de origen biológico, natural, “totalmente respetuoso con el medio ambiente y con un coste muy inferior al de cualquier tipo de energía de origen fósil, por lo que su instalación supone además un importante ahorro económico y una disminución de las emisiones de carbono y azufre a la atmósfera”.
Ya el pasado año -buscando ahorrar en el coste del consumo- el equipo de Gobierno sacó a libre concurrencia la renovación del pliego de empresa suministradora de energía eléctrica, que desde entonces gestiona Aldro. Previamente, una empresa de ingeniería especializada realizó un detallado estudio de los cuadros y potencias de la red de alumbrado público, a fin de adaptarlos a un consumo más eficiente y de menor coste. Esta actuación, previa a la crisis energética actual, ha permitido al Consistorio ajustar al máximo un mejor precio hasta noviembre de 2023.